¡Mr. Peanut ha muerto!
Y tan mono que se veía el mister con su monóculo. Y su porte. Y su apellido. Y su bastón.
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Yo tengo a my very own Mr. Peanut y curiosamente también se ha ido, al menos para mí. So long, Planters!
Cacahuates japoneses con chamoy. De postre, un pulparindo. Eso quiero comer de navidad.
Por qué lo mataron?
Para comérselo?
Quise decir tenía, he´s gone for good. Blah, creo que ya te sabes ese chiste local.
Yo aun conservo mi juguete comprado de tianguis de Mr. Peanut.
Pero de hecho muchos lo odiaban que por ‘Burguesito Capitalista’. Era cuestión de tiempo su muerte.
Peanut sat on a railroad track
His heart was all a flutter …
Round the bend, came Number Ten —
Toot! Toot! …. Peanut BUTTER